Esta humbucker Dirty Fingers es una réplica precisa de la famosa humbucker súper caliente que Gibson presentó por primera vez en la década de 1970 y se convirtió en una de las más populares de la serie. Es vanguardista y único con tres potentes imanes de cerámica que se utilizan para producir una salida masiva para una interpretación impactante y directa sin comprometer el tono original de su guitarra. Esas fuertes partes rítmicas sonarán igual de hermosas que esas pistas agresivas que derriten la cara que encienden la pastilla «Dirty Fingers». Las piezas polares ajustables ayudan a hacer de esta una de las pastillas más fáciles de manejar, lo que le da al músico un mayor control sobre la salida de cada cuerda individual.